RESEÑA
1ª PARTE
“El devenir de las Españas:Del todo a la nada”es el nuevo titulo que añado a mi tan cacareada preocupación por el futuro de mi querida España que en este momento singularizo, cuando antes durante varios siglos se pluralizaba con el termino de las Españas.
Era el rey Felipe II quien manifestaba con orgullo que “en su Imperio no se ponía el sol”.
Una aseveración completamente acertada pues las Españas era un Imperio Universal que comprendía en Europa,la península Iberica con la anexion de Portugal y su Imperio americano(Brasil),africano(Guinea Bissau,Angola y Mozambique e Isla de Santo Tome) y asiático(Goa,Diu , Macao y sus posesiones de Indonesia);en la actual Francia el Rosellon,la Cerdaña,el Franco Condado;en Italia el Milanesado,el reino de Napoles,Sicilia y Cerdeña y las islas de Creta y Chipre ;en la actual Holanda y Belgica los Paises Bajos y Flandes;en el norte de Africa,Ceuta ,Melilla ,Oran,Bujia ,Tunez e islas adyacentes;en America los Virreinatos de Nueva España,Venezuela,el Virreinato de Nueva Granada,Provincias Unidas de America central,El Peru y el Virreinato de la Plata,las islas de Cuba,Santo Domingo,Puerto Rico,Jamaica ,Trinidad y otras ;en Asia las Islas Filipinas y en el Pacifico las islas Marianas,las islas Carolinas y la isla de Guam,
Varios siglos han pasado desde que se inicio la decadencia y FelipeII en su vejez se lamentaba clamando:”Dios que me ha concedido este vasto Imperio,no me ha dado un hijo capaz de mantenerlo”.
Sería Polibio, historiador romano, quien predijo que el movimiento de la Historia estaba sometido a la fatalidad de un proceso cíclico. Fundamentándose en esta convicción, Polibio expuso su teoría sobre “los ciclos constitucionales”.
Así comentaba de forma genérica, que “la Monarquía, engendraba la Tiranía así como la Tiranía engendra a su vez la Aristocracia, la cual engendra a la Oligarquía y la Oligarquía es reemplazada por la Democracia y al final la Democracia acabará con la lucha de todos contra todos, en una guerra civil y entonces le sucede la autoridad única en forma de Despotismo”.
Polibio expone, que este carácter natural, se desarrolla conforme a la Naturaleza y por tanto los hombres siempre pueden prever los futuros estadios que van a acontecer.
Si analizamos este pensamiento filosófico y observamos el
ultimo desarrollo de la Historia España en tres Edades, Media, Moderna y Contemporánea, comprobaremos el cumplimiento de los ciclos anunciados y en que etapa nos encontramos y el fatal destino que nos espera si no actuamos con un cambio de timón en la política nacional y corregimos nuestro rumbo equivocado, que nos dirige hacia la autodestrucción como pueblo.
En la Edad Moderna, son los Reyes Católicos, quienes definitivamente terminan con la anarquía que reina en Castilla, desde Enrique II de Trastamara, más conocido como Enrique el de las Mercedes, por sus dádivas que conceda a los nobles, por el reconocimiento como rey fratricida y transcurre un periodo de ciento cincuenta años, donde el pueblo español está dividido en banderías y en acontecimientos intrascendentes.
La monarquía se refuerza con los mandatos de Carlos I,El Emperador y Felipe II y sucede un periodo de decadencia con los últimos Austrias, Felipe III, Felipe IV y Carlos II, a quienes les correspondería el apelativo de “reyes holgazanes” por su incapacidad para dirigir personalmente sus responsabilidades de gobierno y delegar en válidos, que abusando de su posición, acumularon cargos, honores y riquezas con ambiciones desmedidas y codicias insaciables, olvidando la obligación del gobernante que es servir al bien común del pueblo.
2º PARTE
Felipe III y Felipe IV, no pueden con la dura herencia y a este no poder le corresponde una progresiva relajación en la moral interna española, que va como soltando amarras de responsabilidades, de criterios morales que van desbaratando su capacidad política, encharcando cada vez más, su ímpetu y su voluntad de acción.
De esta monarquía decadente, le sucede la oligarquía, protagonizada por los validos, primero el marqués de Denia, seguido de los duques de Lerma, Uceda, el marqués de Siete Iglesias y por último el Conde-Duque de Olivares,D. Gaspar de Guzmán, hombre entregado a los intereses de la monarquía, pero quizás cegado por su política exterior, haciendo a España, participe una serie de conflictos bélicos como la Guerra de los Treinta Años, empobreciendo la frágil economía del Estado y desatendiendo la política interior.
La España de los Austrias, es un estado descentralizado, formado por un conjunto de reinos independientes ( Castilla, Aragón, Navarra, Portugal, el Reino de las dos Sicilias y el territorio de América),todos unidos por la Corona, como vástago común, en referencia la figura del Rey de España, existiendo un régimen de autonomías de los distintos territorios.
El movimiento desintegrador se inicia en Cataluña y es Barcelona gobernada por la alta burguesía y un campesinado muy próspero, quienes ambos grupos sociales, unirían sus fuerzas, siendo este hecho lo que ocurrió en el año 1640 como el llamado “Corpus de Sangre”.
Las tropas catalanes rebeldes derrotaron las tropas reales de Felipe IV y Cataluña parecía irremisiblemente perdida para siempre, pero unida a Francia , el comportamiento y las depredaciones que fue objeto Cataluña por Francia, hicieron cambiar la situación y se unió definitivamente a España.
La secesión en Portugal fue un hecho y un contagio de la secesión de Cataluña. Se inicia la sublevación en Lisboa, en fecha 1 de diciembre de 1640, aclamando al duque de Braganza, de la antigua familia real portuguesa, con el nombre de Juan IV.
El éxito de los movimientos separatistas de Cataluña y Portugal animó a otros separatismos de la corona hispánica.
En Andalucía se levantó un futuro rey, el duque de Medina Sidonía, hermano de la reina de Portugal y con la complicidad del marqués de Ayamonte se quisieron constituirse como reino independiente con la ayuda portuguesa.Olivares inmediatamente actuó y ordenó ejecutar al marqués de Ayamonte y desterró al duque de Medina Sidonia.
En Aragón hubo otra conspiración para nombrar rey al duque de Hijar pero inmediatamente fracasó.
En Sicilia y en Nápoles, la nobleza se puso a favor de la Corona española y el motín secesionista se transformó posteriormente en una guerra social. Se produce un movimiento secesionista iniciado por un caudillo popular Masaniello, que se alza contra soberanía española y hace huir al Virrey, duque de Arcos y establece un gobierno con los desvaríos de grandeza de
tiempo de atrás en Roma, de Nicolás de Rienzo, pero la nobleza se puso a favor de la Corona española.
Este es asesinado y el pueblo sin caudillo, se apacigua, y en 1648 es nombrado un nuevo Virrey, el duque de Oñate que logra la pacificación.
La nueva monarquía entronizada, en referencia a la Casa de Borbón, con la figura de Felipe V, como primer rey, se inicia el siglo XVIII, con un cambio de timón nacional, en la concepción descentralizada del reino de España e introduce el centralismo monárquico con los Decretos de Nueva Planta.
En la Edad Contemporánea, se reproducen “dos ciclos constitucionales” según la teoría de Polibio.
El primero tiene lugar, tras el triunfo de “la Revolución del 1868” la Gloriosa, movimiento revolucionario burgués, que acabo con la monarquía borbónica de Isabel II.
La Revolución del 1868, no sólo significó el mero derrocamiento de una monarquía y de su reina, sino el momento para llevar adelante, una serie de transformaciones estructurales político económicas que democratizasen la vida política y destruyesen las trabas que se oponían a la democratización del sistema liberal capitalista, implantado en la etapa anterior.
Es la clase oligárquica militar, representada por los generales Serrano, Prim y el almirante Topete, los que suceden temporalmente al anterior sistema, acabando en un sistema democrático, como es la instauración de la 1ª República donde Asamblea Nacional asume todos los poderes y declara como forma de gobierno de la nación, la República, dejando a las Cortes Generales, la organización de la forma de gobierno.
3º PARTE
Se suceden cuatro gobiernos; el primero de Estanislao Figueras, seguido de otro anárquico con la implantación del federalismo de Pi y Margall, Salmerón y el último D.Emilio Castelar quien decidió salvar a la Patria, anunciando que establecía el principio de autoridad y e imponía el orden público y es derrotado en la sesión del 2 al 3 de Enero de 1874 y ante este caos, una fuerza militar dirigida por el general republicano Pavía, invade el hemiciclo de las Cortes, con las fuerzas de la Guardia Civil y disuelve estás.
En los últimos momentos, la Providencia Divina ilumino al pueblo español, para evitar la catástrofe, apareciendo personajes carismáticos como reyes, válidos o jefes militares etc.,tal fue el ejemplo del emerito general Pavía quien impidió el holocausto de la Patria.
Esta dramática experiencia de democracia liberal ensayada, que desafortunadamente se repitió en 1931, con la proclamación de la 2ª Republica y cuyos cimientos fallaron porque no se encontró una convivencia pacífica y que no tenia otra alternativa que la rectificación y sería en julio de 1936 con la desgraciada tragedia de la guerra civil, la prueba definitiva de todo experimentado fracaso.
Actualmente acabada la etapa del cesarismo político, representado por el gobierno autoritario y centralista del general, Franco, se estableció un nuevo sistema político, de monarquía parlamentaria, con una democracia representativa por partidos políticos y una autonomía de regiones, con el intento de paliar las pretensiones separatistas de Vasconia y Cataluña.
Todas las medidas adoptadas por varios gobiernos sucesivos, de distinto signo político, han sido un fracaso, y nos encontramos en la encrucijada de un deterioro generalizado de la vida política por el trato de favor a ciertas autonomías (el cupo vasco y navarro y el régimen fiscal aprobado para Cataluña) que origina un incumplimiento tácito del principio de igualdad de trato de todos los españoles.
La actual Constitución es necesario derogarla por un texto constitucional que corrija los errores que tras sus 38 años de vigencia son notorios y también realizar un cambio de rumbo político por el régimen instituido de la descentralización política de la España de las Autonomías que ha sido un consumado fracaso porque no ha garantizado el principio de igualdad de los españoles(Cupo vasco, Cupo navarro y quizás ahora no se que dadiva se concedera a los independentistas catalanes etc,.) originando un excesivo gasto insostenible que nos aboca a la quiebra y que ha dividido cada vez más a los españoles inculcándoles egoísmos territoriales, expresados en las manifestaciones políticas convocadas en el país tras los proyectos de trasvases de agua de los ríos nacionales para su aprovechamiento racional y solidario (recordemos los proyectos de trasvase del Ebro, Tajo-Segura etc,.),asi como el incumplimiento en algunas Comunidades Autonomas y especialmente en Cataluña del uso de la lengua oficial del castellano donde el sector nacionalista desprecia al castellano como idioma nacional e impide su uso en el ámbito académico o la escolarización en el idioma castellano hasta el punto que sus actividades culturales( museos, órganos oficiales e incluso en la actividad económica) se impide rótular en castellano imponiendo las autoridades un régimen sancionador con multas coercitivas si los establecimientos comerciales e industriales no están sus nombres rotulados en el idioma catalán y otras como el uso de la bandera nacional junto a la autonómica en Instituciones o edificios públicos.
Acabemos cuanto antes con el Estado autonómico que origina todos estos problemas expresados y lo sustituimos por un Estado Unitario centralista en lo político donde se reconozca a España como única nación y descentralizada en lo administrativo con la institución de un Estado Regional a imitación a Italia donde el Congreso de Diputados atienda a la política nacional y el Senado se limite a las diferentes regiones del Estado
Dos modelos a imitar, que son Francia y Portugal, ambas Repúblicas centralistas, la primera con más de doce lenguas y esta multiplicidad lingüística no genera sentimientos nacionalistas excluyentes y al contrario existe un fervorosa conciencia nacional y el segundo, con la estabilidad institucional, que se ha adaptado a gobiernos de distinto signo político, con una conciencia nacional consolidada.
Fdo: Julio Reyes Rubio “Al-Mayriti”